VILLA ANTARES

VILLA ANTARESsgplus2024-07-31T06:38:53+01:00

Villa Antares se encuentra enclavada en una parcela de unos 3500 m2 con una pronunciada pendiente que se deja caer sobre uno de los hoyos del campo de golf de Sotogrande, una de las urbanizaciones más exclusivas de Europa. Se erige como un ícono de elegancia contemporánea y diseño vanguardista. Con sus imponentes 2900 metros cuadrados construidos, esta residencia redefine la experiencia del lujo en el entorno exclusivo de La Reserva, ofreciendo vistas panorámicas del mar Mediterráneo que cautivarán a cada afortunado espectador.

Diseñada con una arquitectura de líneas limpias, la villa se integra armoniosamente con su entorno, aprovechando la inclinación de su terreno para crear niveles diversos que maximizan las vistas y la conexión con el paisaje, posicionándose de forma orgánica en su abrupta pendiente, permitiendo excavar en ella una planta de sótano diseñada para el ocio y disfrute en su máxima definición. La presencia del agua, fundiéndose con el horizonte y cayendo en forma de cascada por la escarpada colina, así como el uso de la curva cuando el diseño lo requiere, fusionan horizonte y terreno con la arquitectura, creando un ambiente de estabilidad y conexión con la naturaleza. Esta fastuosa villa se integra en el entorno sin impostas. Se adueña de la parcela de forma sencilla y fluida. Una entrada rodada en uno de los extremos de su fachada a calle nos guía hacia un amplio aparcamiento interior con capacidad para seis vehículos. Los vehículos más impresionantes se podrán exponer en la gran cristalera, para que así nuestros invitados se deleiten con su presencia al aceptar la invitación de pasar un rato maravilloso en nuestra villa. Además, este espacio alberga un área de trabajo dedicado a reparar, diseñar y crear todo aquello que sus dueños imaginen, desde el cual se disfruta de un horizonte salado para que la inspiración sea más fácil de alcanzar. Incluso pudiendo salir a su propia terraza si así se desea. El acceso peatonal es una experiencia visualmente impactante. Un recorrido sinuoso y escalonado nos permite disfrutar de diferentes volúmenes donde predominan la curva de forma sutil y acertada. De forma casi involuntaria atravesando una lámina de agua que captará toda nuestra atención, cruzamos la entrada principal, donde nos sumergimos en una espectacular doble altura que revela uno de los mayores atractivos de la residencia: su imponente vista panorámica hacia el campo de golf, Sotogrande y el azul del mar fundiéndose con en el infinito.

La distribución de los espacios, con amplios salones y una cocina – comedor con un atractivo lucernario , prioriza la escala de los residentes y captura la grandeza del paisaje a través de grandes ventanales dispuestos de suelo a techo. El ala de dormitorios, separada por un exuberante patio interior, alberga tres suites, cada una ofreciendo vistas únicas y un espacio más privado para su vida exterior. Una escalera menos concurrida conduce a una zona de estudio en la planta superior, un refugio para el trabajo y la contemplación. En esta misma planta primera, a la que también se accede por la escalera principal o desde el estudio por una pasarela que nos vuelca hacia la doble altura, se encuentra el dormitorio principal. Una máster suite con terraza privada que no escatima en diseño y comodidades, proporcionando un santuario exclusivo con vistas inigualables. La accesibilidad es otra prioridad en el diseño de esta villa, con un ascensor que permite explorar cada rincón, incluido el extraordinario sótano diseñado para el entretenimiento. Este nivel subterráneo alberga una sala de audiovisuales con calidad cinematográfica. Una sala de golf virtual para practicar solo o con amigos. Un amplio y equipado gimnasio con posibilidades múltiples. Un spa con sauna y piscina climatizada que nos permitirá relajarnos después de un día intenso en el campo de golf, que posee luz natural propia y una exótica vegetación que nos dará la serenidad necesaria para estos momentos de abstracción. Una bodega donde se podrán realizar interesantes catas de vino disfrutando del espacio circular que invadirá también de verde y luz esta planta aun encontrándonos bajo tierra.

Dos dormitorios en suite independientes en este nivel ofrecen privacidad a los invitados, cada uno con su propia terraza que se abren al jardín. Esto les permitirá pasar desapercibidos si así se requiere y tener su propio lugar secreto en esta gran vivienda. La zona de servicio también se encuentra en esta planta, en una zona más discreta. En ella se podrá hacer uso del apartamento, con cocina propia, el área de lavandería y la sala de instalaciones, que constituye el núcleo tecnológico de la residencia desde donde se podrá ofrecer el máximo confort y sostenibilidad a la construcción. Cabe destacar que no faltarán instalaciones de última generación, domótica y una iluminación para que cada espacio destaque por sí solo junto con una decoración y un mobiliario de alta gama. Esta zona se conecta a través de una escalera secundaria de forma directa con el área de cocina y alacena en planta baja, así como con el aparcamiento en planta primera. Se disfruta en ella de los patios interiores que caracterizan a la vivienda, permitiendo la iluminación natural, la vegetación y la ventilación cruzada en todos y cada uno de sus rincones.

En la planta principal no podemos pasar por alto un amplio porche donde las noches de verano serán menos calurosas viendo desbordar el agua de la gran piscina por su cascada. Estos elementos, diseñados con formas fluidas que desdibujan los límites entre interior y exterior, y las curvas como elementos protagonistas, permiten que los espacios cautiven a sus habitantes con su grandiosidad y armonía. Los materiales autóctonos, como el blanco costero, la madera y la piedra, combinados con una cuidada selección de vegetación nativa, integran la villa sin esfuerzo en el paisaje. Paisaje que suma una gran importancia con el compromiso sostenible que se desarrolla en su edificación y el diseño de sus instalaciones. La exclusividad de la Villa Antares no solo reside en su ubicación privilegiada en una de las mejores parcelas de La Reserva junto al campo de golf y sus impactantes vistas panorámicas, sino también en su diseño elegante y sofisticado. Cada espacio se convierte en un deleite sensorial, ofreciendo una experiencia de vida inigualable en uno de los rincones más exclusivos de Sotogrande.